Todos los vinos andaluces poseen un gran prestigio internacional por su magnífica calidad


Hay una gran diversidad de vinos en Andalucía, aunque tienen en común un estilo propio.
Todos los vinos andaluces poseen un gran prestigio internacional por su magnífica calidad. Una de sus peculiaridades es que no responden, como otros tintos o cavas, a ningún estándar foráneo, lo que le infiere un carácter puramente español.
El viñedo en Andalucía ocupa una extensión de 40.000 hectáreas. De ellas, más del 50% pertenecen a las distintas denominaciones de origen. La provincia de mayor extensión en viñedos es Cádiz con 11.000 hectáreas. Le sigue Córdoba con 9.000, Huelva con unos 6.500, Granada con aproximadamente 5.000, por último nos encontramos en Málaga con 3.000 hectáreas. Seis son las denominaciones de origen de Andalucía: Jerez-Xérès-Sherry, Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda, Málaga, Sierras de Málaga, Montilla-Moriles y Condado de Huelva.
En la zona oeste de la provincia de Cádiz se producen los vinos pertenecientes a la Denominación de Origen Jerez-Xérès-Sherry y Manzanilla Sanlúcar de Barrameda.
"Se trata de denominaciones diferentes que comparten el mismo consejo regulador y las mismas superficies de viñedo".
Vinos de Cadiz.
Esta zona posee dos tipos de suelos: la tierra albariza, rica en carbonato cálcico, arcilla y sílice, se crea por sedimentación de aguas; y las tierras denominadas barros, de un color pardo.
Los municipios gaditanos que comparten esta denominación son: El Puerto de Santamaría, Jerez de la Frontera, Chipiona, Sanlúcar de Barrameda, Trebujena, Puerto Real, Rota y Chiclana de la Frontera.
La uva blanca es la que se utiliza para la elaboración de estos vinos andaluces, en sus variedades de palomino y, en menor medida, la uva Pedro Ximénez y Moscatel. Se consiguen vinos de baja acidez, algo insípidos, con cuerpo y sin gran afrutamiento. El secreto de estos vinos es el proceso de elaboración y crianza (en vasijas de roble) especial.
Los tipos de vinos que podremos degustar son:
Fino
Manzanilla
Amontillado
Oloroso
Palo Cortado
Pale Cream
Cream
Pedro Ximénez.
El Consejo Regulador de esta denominación de origen se constituyó en 1935 y su sitio web es: www.sherry.org
Vinos de Córdoba.
Al sur de la provincia de Córdoba, en zonas de campiña, de suelos calcáreos y con un clima mediterráneo con influjos continentales, se crían los vinos pertenecientes a la Denominación de Origen Montilla-Moriles.
A la hora de clasificar y reconocer los vinos de esta denominación, coincide con Jerez en Finos, Amontillados, Olorosos, Palos Cortados, Pedro Ximénez… Asimismo, utiliza el mismo procedimiento de soleras y crianzas. Esto no supone que sean iguales, porque cada uno posee su personalidad propia.
La uva predominante es la uva Pedro Ximénez, a diferencia de la Palomino en Jerez.
El fino de Montilla posee un aroma continental de tomillo, monte bajo, romero. Su paladar es avellanado, en cambio el de Jerez es almendrado, de aromas a aceituna y de gusto muy seco.
Los vinos de esta denominación tienen más cuerpo que los de Jerez, siendo más oleosos, con baja acidez, menos seco y con final amargoso. Esto tiene una fácil explicación: la lejanía del mar.
Tipos de vinos de la Denominación de Origen Montilla-Moriles:
Finos
Amontillados
Olorosos
Pedro Ximénez
Blancos.
El Consejo Regulador se constituyó en 1944. Su sitio web: www.Montilla-moriles.org
Vinos de Huelva.
Los vinos pertenecientes a la Denominación de Origen Condado de Huelva tienen su crianza en un terreno que se extiende por el sureste de la provincia de Huelva, entre el Guadiamar y la Ría del Tinto.
14 municipios son los que aportan las hectáreas necesarias para elaborar sus vinos: Almonte, Beas, Bollullos Par del Condado, Bonares, Chucena, Hinojos, La Palma del Condado, Manzanilla, Moguer, Niebla, Rociana del Condado, Villalba del Alcor, Villarrasa y Trigueros.
El color pardo de su suelo ondulado, arenoso, no demasiado calizo, unido al clima mediterráneo con influencia atlántica, con inviernos suaves y largos veranos, hace que se consiga una vid de calidad. La uva más utilizada es la Blanca Zalema, junto a la Palomino, Listán, Garrido Fino y Moscatel. Con estas variedades se elaboran los vinos del Condado o vinos del Descubrimiento, porque la primera partida constatada hacia las Indias, desde el puerto de Sevilla, fue en 1502.
Los tipos de vinos que se producen son:
Condado de Huelva
Condado de Huelva Joven
Condado Pálido
Condado viejo.
El Consejo Regulador fue constituido en 1963 y su sitio web es: www.vinoscondadohuelva.com
Vinos de Málaga.
Parte de los vinos que se producen en la provincia de Málaga pertenecen a la llamada Denominación de Origen Málaga.
Su producción está segmentada en cuatro subzonas que se encuentran a cierta distancia entre sí, lo que favorece distintos ámbitos climáticos.
Esta denominación de vinos es una de las más antiguas de España y el tipo de uva que se utiliza para la elaboración de sus caldos es la Moscatel, que se encuentra en el oeste y la Axarquía, en diferentes variedades; y la Pedro Ximénez que se cultiva en Los Montes de Málaga y la Comarca norte. Se consiguen unos vinos generosos con un estilo y personalidad que los diferencian de los demás.
Los tipos de vinos Denominación de Origen Málaga son:
Lágrima
Moscatel
Pedro Ximénez
Dulce Color
Pajarete
Seco.
Dependiendo del período de envejecimiento al que se someten cada uno de los vinos, se clasifican en:
Málaga Joven: No tiene envejecimiento.
Málaga Pálido: Sin envejecimiento y producido con la uva Pedro Ximénez y/o Moscatel.
Málaga: 6 a 24 meses de envejecimiento.
Málaga Noble: de 2 a 3 años de envejecimiento.
Málaga Añejo: de 3 a 5 años de envejecimiento.
Málaga Trasajeño: Más de 5 años de envejecimiento.
Año de constitución del Consejo Regulador Denominación Origen de Málaga: 1933. Su sitio web: www.vinomalaga.com
Vinos de la Sierra de Málaga.
En la provincia de Málaga se producen vinos pertenecientes a la Denominación de Origen Sierras de Málaga.
Se trata de una nueva denominación que produce vinos diferentes a los generosos de Málaga. Aún así, están regulados por el mismo Consejo regulador.
Además de las zonas que se citan en la D.O. Málaga, en ésta se une la subdenominación Serranía de Ronda.
Las variedades con las que se elaboran son:
Chardonay
Macabeo
Sauvignon Blanc
además de la Pedro Ximénez y Moscatel.
El vino resultante tiene como características: los blancos poseen un color amarillo pálido, con un aroma varietal, nítidos y elegantes; de sabor afrutado y fresco, con tonos ácidos.
Los tintos están bien estructurados, con cuerpo, predominando los aromas y sabores minerales y de terruño. Sitio web: www.museovinomalaga.com