Este espacio de peregrinos -peregrinos a Granada-, que habita un palacete del XVII, no es sólo un hotel, porque está poblado de personajes e historias, reales y ficticias, y quiere construirse con las vivencias, inquietudes y emociones de quien esto lee. Y con el diálogo entre sus huéspedes. Gar-Anat es nombre primitivo de Granada, y este edificio de origen noble y carácter de corrala del Siglo de Oro rinde tributo al mundo de la escena ambientando en el mundo del teatro sus espacios: zaguán, aljibe abovedado, biblioteca, patio de columnas y habitaciones. Diez de éstas escenifican sobre la obra de un peregrino a Gar-Anat. Estamos en El Realejo, al pie de La Alhambra y a pocos minutos de la catedral. Sus habitaciones nos inspiran y transportan a otras épocas. Nombres de obras de Lorca, Manuel de Falla, Amin Maalouf... bautizan cada una de sus estancias. Una de sus habitaciones ocupa el torreón del edificio, con preciosas vistas al Realejo y a las torres de la Alhambra.
