En cuanto a vinos varietales, sin DOP ni IGP, España se sitúa en cabeza con 1,8 millones de hectolitros


España es uno de los grandes productores mundiales de vino: primero en el ranking por superficie plantada, tercero por producción (debido a un rendimiento menor que el de Francia e Italia) y segundo exportador mundial en términos de volumen, aunque tercero en términos de valor. Por su importancia en términos económicos, pero también sociales y medioambientales, así como por la importancia del vino como imagen del país en el exterior, el sector es de extraordinaria relevancia en España. Según datos de la OIV[1], en 2011 la superficie vitícola mundial disminuyó en 94.000 hectáreas respecto a 2010, estimándose el total mundial en 7.495.000 ha. El viñedo comunitario total (UE-27) está reduciendo progresivamente su superficie plantada, pasando de las 3.792.000 has en el año 2008 a las 3.530.000 has en el año 2011. Este proceso es consecuencia de la combinación de factores como la reestructuración del viñedo y el impacto de la crisis vitícola, que por otra parte, se ha dejado sentir de forma distinta por zonas y tipos de vino y a la que se ha añadido el programa europeo de ayuda a los arranques. La disminución del viñedo comunitario queda compensada por el mantenimiento de las superficies plantadas del resto del mundo. Mientras disminuyen las plantaciones en Argentina y Turquía, éstas crecen en China y Australia y se mantienen casi invariables en EE.UU. y Sudáfrica.Según la estimación de la OIV, la producción mundial de vino de 2011 (sin contar zumo y mosto) puede situarse en 265,8 millones de hectolitros, 700.000 más que en 2010. El primer país productor de vino es Francia, con 49,6 millones de hl (18,7% mundial), seguido por Italia, con 41,6 millones de hl (15,6% mundial), y España, con 34,3 millones de hl (12,9% mundial). Fuera de la Unión Europea, el nivel de producción en 2011 es ligeramente superior, con 108,9 millones de hl, a 2010 (108,7 millones de hl). EE.UU. es el país no europeo de mayor producción de vino con 18,7 millones de hl, lo que supone un descenso de más de 2 millones de hl respecto a 2010. En segundo lugar, se encuentra Argentina con 15,5 millones de hl, que disminuye sus cifras en 800.000 hl con respecto a la producción del año anterior, cuando se aumentó considerablemente. En tercer puesto aparece Australia con una producción de vino de 11 millones de hl (-0,2 millones de hl), seguida de Chile, con 10,6 millones, casi un millón y medio más que en 2010. Respecto a otros países de fuera de la UE, Sudáfrica pasa de producir 9,3 millones de hl en 2010 a 9,7 millones en 2011, aunque aún por debajo de la cifra registrada en 2009, que rozó los 10 millones. Brasil aumenta de 2,5 millones de hl en 2010 a 3,5 millones en 2011, volviendo a registrar datos positivos tras la caída en 2010. Nueva Zelanda retorna a niveles por encima de los 2 millones de hl; en concreto, 2,4, tras caer en 2010 hasta los 1,9 millones. Suiza, por su parte, incrementa ligeramente la producción, en 100.000 hl.De acuerdo con los últimos datos publicados por la OIV y siendo estos aún estimaciones sujetas a modificación, la producción de vino de la Unión Europea en 2011 se sitúa en 156,9 millones de hl, ligeramente superior a la de 2010 (156,4 millones), aunque muy inferior a la de 2009, cuando se rozaban los 163 millones de hl. Francia produjo el pasado año 3,9 millones de hl más que en 2010. Italia experimenta una importante regresión de casi 7 millones de hl, motivada en gran parte por la política de reestructuración del viñedo. Alemania y Austria aumentaron considerablemente el volumen de producción, de 6,9 a 9,6 millones de hl el país germano y de 1,7 a 2,8 millones el estado austríaco. Según las cifras de la Comisión Europea, actualizadas a febrero de 2012, la producción de vino y mosto de uva en la Unión Europea alcanzaría los 165,0 millones de hectolitros en la campaña 2011/2012, lo que supondría un aumento del 1,5% con respecto a la campaña 2010/11, aunque una caída del -7% en relación a la media de las cinco últimas campañas. La producción destinada a vinificación se estima en los 156,9 millones de hectolitros mencionados anteriormente, de ellos, 68,6 millones de hectolitros habrían sido destinados para vinos con Denominación de Origen Protegida DOP[1], 33,6 millones para vinos con Indicación de origen Protegida IGP [2] , 2,8 para vinos varietales sin DOP ni IGP y 51,6 millones para los demás vinos. Por tipo de vino, Francia ocupa la primera posición como productor de vinos con DOP, con 23,3 millones de hectolitros, frente a los 13,8 de Italia y los 13,7 de España. En lo que respecta a los vinos con IGP , la producción francesa asciende a 14,5 millones de hectolitros, la italiana a 11,7 y la española a 3,3 millones. En cuanto a vinos varietales, sin DOP ni IGP, España se sitúa en cabeza con 1,8 millones de hectolitros, seguida de Italia (0,4 millones de hl) y Bulgaria (0,34 millones de hl). Por último, en lo que respecta a la categoría de otros vinos, Italia es la principal productora con 15,9 millones de hl, ligeramente por delante de España con 15,5 y de Francia con 12,3 millones de hl. www.winesfromspain.com, elclubdelsommelier@gmail.com