¡Cómo apetece un rosado! Los rosados, cada día más de moda por su versatilidad y los magníficos vinos que nos proponen las diferentes bodegas. Es bueno no confundir Rosados con Claretes¡no es lo mismo!.Sin duda alguna un buen rosado va bien con casi todo y sobre todo los rosados actuales, elaborados con las más modernas técnicas de vinificación, sin perder un ápice de su encanto "rustico".Ciertamente han sabido ganarse un destacado lugar en el Olimpo de los vinos.Rosados y claretes dos tipos de vinos que pueden confundirse entre si, pero que no son lo mismo. Los Rosados proceden principalmente de uvas tintas o de mezcla de uvas blancas y tintas, las uvas rosadas son una rarísima excepción, como la uva denominada Poulsard, que tiene jugo y piel rosados.Se elaboran tras una corta maceración en frío del mosto, principalmente el mosto flor o primera, con sus hollejos, sin que llegue a fermentar hasta alcanzar la pigmentación deseada y después se realiza el "sagrado" o separación rápida del mosto y la pasta sólida.Otra forma de hacerlo es por prensado directo,que sería igual que un proceso de vinificación en blanco, lo único que lo diferencia es que el prensado se hace con uvas tintas o con la mezcla y no con uvas blancas, de este modo, el contacto con los hollejos tintos solo se produce durante el prensado. Los claretes se elaboran con parte de uva blanca y parte de uva tinta.El mosto fermenta con el hollejo dando un vino de bajo color ya que la uva blanca no colorea. El rosado se vinifica como un blanco, el clarete como un tinto, por ello se puede decir que el clarete es un tinto de bajo color. La actual normativa prohíbe la antigua practica de mezclar vino tinto con blanco para obtener claretes.Tanto los rosados como lo claretes se recomienda consumirlos a una temperatura parecida a los blancos, en todo caso, al gusto de cada uno. La tonalidades del vino rosado son muchas y sutiles. Dependen de la variedad de la uva, el tiempo de maceración y la intención del winemaker